jueves, 24 de abril de 2014

Me las invente todas...


Hola, me puedes decir la hora?
Hola como te llamas?
Hola, donde queda la calle...?
Hola, ya paso en transporte?
Hola, tienes mucho rato aquí?
Hola, vino la profe?
Hola, puedo preguntarte una cosa?
Hola,... no nada se me olvido...

Me las invento toda, cuando voy de paso, le tropiezo y le digo: "disculpa", voy por un lado y al verla pasar, me regreso de mi destino para encontrarla de nuevo.
A veces la he perseguido, y la miro de lejos maquinando la ocasión de conocerla, y si la conozco de entablar una conversación.
Una vez me comí una empanada en el centro de Upata y estaba una bella joven morena atendiendo, luego que pague pedí una servilleta extra y escribí mi numero de teléfono; pensé; si le guste debe enviar el mensaje: no siempre las cosas me salen tan buenas, jajaja me escribió.

Y que de hacerme con su numero de teléfono; me invento una actividad, un motivo para cambiar de numero, "no hallo mi teléfono repícamelo por favor"

En una oportunidad vi una doctora de unos 22 años, y me dio por marearme y dolerme el pecho, se lo manifesté: "doctora siento un mareo y un dolor en el corazón" y ella solo me dijo: "dentista" jaja, debió ser de un diente mi dolor.

Quise salvar una relación y se me ocurrió una vez hacer un desayuno en forma de corazón para ella; bueno en Venezuela se llaman arepas aquel desayuno que le lleve.
Así se enamora Edgar Zurita. 

jueves, 10 de abril de 2014

Como descifrar secretos


Desde la adolescencia en el que empezamos a fijarnos en alguien, simples objetos toman significados que se hacen sagrados, conservamos un cabello, una carta, un retazo de papel, una fotografía robada, una nota en la libreta y así muchas cosas.


Por lo que es importante regalar para escribir sobre la linea de vida del corazón de quienes en un instante llegan y en un instante se van.
Los que se van simplemente un objeto le acompaña, de esa gran historia que vivió el que se queda y que la considera tan sagrada.

Para uno es coleccionista de pasado, de desperdicios, de indignidad, de basura, pero el que ama sabe que conserva lo mas valioso, lo mas bonito, hasta el ultimo día en que miraron sus ojos. Pero claro es solo eso recuerdo porque la vida debe avanzar.

Así se enamora Edgar Zurita.